5 beneficios de la improvisación teatral en los niños

Los ejercicios de improvisación teatral son dinámicas sencillas que ponen el acento en la importancia de potenciar la espontaneidad. El diálogo y la actuación no son el resultado de un ensayo previo, sino una respuesta que fluye al compás del presente.

El universo del teatro es beneficioso para los niños porque fomenta el encuentro con la cultura. La improvisación es unos de los temas que forma parte de esta disciplina. Por tanto, ofrece recursos y herramientas para desarrollar habilidades para lograr el objetivo. ¿Qué beneficios ofrece este aprendizaje educativo y entretenido? Comentamos cinco puntos a continuación.

1. Superar la timidez

Las dinámicas llevadas a cabo en el contexto del teatro infantil fomentan el desarrollo de habilidades sociales. Por otra parte, el participante consigue metas que le llevan a superar sus propios límites. Aunque la improvisación teatral sea un reflejo de la espontaneidad y la naturalidad, es una habilidad que también se cultiva y se entrena por medio de la formación.

2. Creatividad

Cada niño es totalmente único, una esencia personal que se manifiesta en el carácter irrepetible de aquellas interpretaciones que son el resultado de la improvisación. Ofrece un contexto para experimentar y crear nuevas posibilidades.

3. Desarrollo de habilidades para la vida

Muchas de las situaciones de la vida cotidiana requieren de altas dosis de improvisación. Todas las decisiones tomadas no son la consecuencia de una larga planificación previa. El teatro aporta un entorno de seguridad en el que desarrollar competencias y destrezas que pueden trasladarse a otros planos de la existencia.

4. Superar el estrés y los nervios ante situaciones nuevas

Conviene recordar que el estrés no siempre es negativo. En ocasiones, está relacionado con una situación específica. Y una vez que la persona se ha adentrado en ese hecho, recupera la calma por completo. Salir fuera de la zona de confort es una necesidad frecuente. La improvisación teatral ayuda al niño a familiarizarse con la experiencia de afrontar en positivo nuevos retos.

Los rostros del mundo del teatro, aquellos que de forma vocacional comparten su pasión con el público, ya sea desde una perspectiva profesional o amateur, explican la mágica sensación que experimentan antes de salir al escenario. Una sensación que se mantiene más allá de los años de experiencia.

5. Comunicación oral y expresión corporal

El niño utiliza distintos recursos en los ejercicios de improvisación teatral. Se expresa por medio del lenguaje verbal, pero también comunica emociones y sentimientos con los gestos de la cara y la expresividad corporal. A través de este proceso, se conoce mejor a sí mismo. El crecimiento personal, la superación de pequeños retos y el contacto con otras experiencias alimentan la autoestima y el autoconcepto de los niños.

La improvisación teatral es un ejemplo de entretenimiento educativo que aporta valores, vivencias y lecciones que pueden ponerse en relación con la propia vida. El teatro es una disciplina que, al igual que el cine y la literatura, está en constante conexión con la existencia. La improvisación gusta a los niños porque conecta con la perspectiva del juego y el sentido del humor.

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