5 beneficios educativos de los debates para niños

El debate es una forma de diálogo. Un intercambio de opiniones en torno a un tema que se convierte en el hilo conductor de las exposiciones realizadas. El debate escolar está dirigido por un moderador que reparte los turnos de palabra. Los niños también pueden aprender a practicar sus habilidades para debatir en la infancia.

En ese caso, el tema seleccionado debe ser sencillo y acorde a los intereses de los participantes. ¿Qué beneficios aporta este ejercicio? En El Blog Infantil compartimos varios factores.

1. Habilidades de comunicación

Para exponer su opinión sobre un tema, el niño debe presentar su planteamiento a través del lenguaje. Por ello, ejercita sus habilidades en la interacción con los demás. Cuando el alumno realiza un dictado ejercita la expresión escrita. Sin embargo, en este contexto desarrolla su comunicación oral.

2. Aprender a escuchar

Un aspecto que puedes observar en un debate entre adultos, es que no existe un verdadero diálogo si no se manifiesta una escucha sincera. Un aprendizaje que también se traslada al ámbito infantil. Uno de los beneficios de debatir sobre un tema es atender el punto de vista del otro, al igual que uno mismo desea ser escuchado por los demás.

3. Descubrir nuevas ideas

El debate es positivo en sí mismo porque crea un marco propicio para aprender gracias a la profundización en torno a un tema interesante. Las aportaciones de cada uno de los integrantes del debate añaden información de valor para los demás. Tras finalizar el debate, el niño sabe algo nuevo que desconocía al inicio de la conversación.

Se fomenta el respeto y la tolerancia hacia otros puntos de vista. Por ello, el debate también está muy vinculado con la práctica de valores que refuerzan la convivencia en sociedad.

4. Aprender a esperar

Como hemos comentado, los debates infantiles están estructurados en turnos de palabras que tienen una duración similar. Para que la conversación fluya, debe existir un orden de participación. El debate ofrece una lección práctica que el alumno puede trasladar a otros planos de su vida: aprender a esperar. Los participantes adoptan un papel proactivo durante el desarrollo del debate.

Y, por ello, se implican en su propio proceso de aprendizaje. Un proceso de aprendizaje en el que adoptan roles diferentes. En ocasiones, como oradores y, en otras, como oyentes.

5. Entretenimiento

Los debates infantiles giran en torno a temas sencillos que gustan y entretienen a los niños. La propia dinámica del ejercicio promueve la diversión porque el enfoque del ejercicio sorprende a quienes lo descubren por primera vez. El carácter lúdico de un juego de grupo está muy presente en un planteamiento de estas características.

Los debates también promueven el trabajo en equipo. Varias personas intervienen en el ejercicio. Por ello, el resultado final del debate mejora cuando todos los niños se implican. La esencia del debate también puede trasladarse al propio hogar. En una sociedad como la actual, tan conectada a la tecnológica, es importante no perder el arte de conversar en torno a temas de los que cada uno puede aportar una visión concreta.

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