Ya tenemos a los niños de vacaciones, en casa y necesitando hacer actividades que les diviertan, entretengan y, si es posible, vayan educándole en nuevas técnicas. La expresión artística puede ser un buen método para que los pequeños, además de pasarlo bien, aprendan nuevas cosas sobre su cuerpo, su voz y, también, a ser más sociales y abiertos ante los demás.
Uno de los elementos imprescindibles para la Navidad son los villancicos. Se trata de canciones sencillas, con un estribillo muy repetitivo y que nos habla sobre las bondades de estas fechas. Aunque la mayoría de ellos hacen referencia al tema religioso, es cierto que, más allá de nuestras creencias, son canciones que nos han acompañado toda la vida, dejándonos un poso de cierta alegría al recordar aquellos días de la dulce infancia. Así que ¿por qué no seguir perpetuándolos a través de nuestros hijos?
Los niños a partir del año de edad pertenece al grupo de mayor riesgo de deshidratación, esto es independientemente de si el clima es caluroso o no. Recientemente se ha realizado un estudio llamado ‘La hidratación en los niños’, el mismo ha sido realizado por pediatras y padres con colaboración con el European Hydration Institute.
Es muy positivo cuando vemos que un padre educa a sus pequeños de manera creativa, ayudand a que la mente no solo pueda catalogar y escoger la información del entorno sino enseñándoles a los niños que puedan responder a las necesidades que requiere una situación de una manera creativa y diferente a lo esperado.
Ya estamos inmersos en plena Navidad, así que podemos ir planteándonos el pasar algún tiempo más con la familia y, en especial, con los más pequeños. Buscar actividades relacionadas con la infancia suele ser relativamente fácil durante estas fechas, ya que los centros culturales y los teatros se preocupan de que los más pequeños tengan diversión suficiente como para disfrutar de unos buenos días navideños.
La infancia es una de esas épocas maravillosas en las que todo es posible. La vida parece tener unos horizontes ilimitados donde la fantasía y la candidez son la razón de ser y el mundo se convierte, entonces, en un paisaje dorado lleno de dulces motivos para la alegría. Pero a medida que uno va creciendo, van desapareciendo ciertos ingredientes mágicos para acabar convirtiéndonos, generalmente, en unos adultos aplastados por la responsabilidad. Entonces dejamos de creer, de soñar y de mirar la vida con la inocencia que se merece.
Si queréis sorprender a vuestros familiares cuando acudan a vuestra casa a comer o cenar, no dejéis pasar la oportunidad de realizar lo que para mi gusto es la manualidad navideña del año: un muñeco de nieve hecho con vasos de plástico. Para realizarlo todos los niños de la casa podrán colaborar, los más pequeños haciendo los accesorios y los más mayores ayudando a grapar los vasos.
Los niños acaban de coger sus vacaciones navideñas así que, además de tener sus días habituales para disfrutar de la televisión con la familia, que suelen ser los fines de semana, tendremos que ir revisando el resto de días que, en estas fechas, dedican siempre un tiempo para los más pequeños. De momento vamos a quedarnos con lo que podemos compartir estos primeros días, el primer fin de semana que abre la puerta a una nueva navidad.
Hace unos días os hablábamos de la nueva serie de Disney "La princesa Sofía", considerada la primera princesa latina. Sofía además es también la primera princesa de Disney que no es adulta y que tendrá que enfrentarse a su nuevo hogar principesco. Por fin la semana próxima podremos ver el estreno del capítulo especial "La princesa Sofía: Érase una vez una princesa", en el canal Disney Junior el sábado 29 a las diez de la mañana.
El mercado de la puericultura es inmenso, cubriendo e incluso rebasando las necesidades de nuestros pequeños. Hay productos que pueden resultar indispensables como los elementos de retención para el coche, los biberones o las cunas. Sin embargo, hay otros que aunque no son de primera necesidad, pueden mejorar la calidad del sueño del bebé y su comodidad. Es el caso de los cojines reductores morfológicos de Babymoov.
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