Vuelta al cole 2016: Preparándonos para retomar la rutina

Después de casi tres meses de ocio, diversión y horarios descontrolados, ya vamos entrando en el momento hostil de retomar la rutina. Apenas nos separan unas pocas semanas de que los niños regresen al colegio con todo lo que ello implica. Ahora es el mejor momento para que empiecen a acostumbrarse a madrugar un poquito e irse a la cama, también, un poco antes, así irán regulando sus horas de sueño.

Para que el cambio no sea del todo drástico y doloroso, ya podemos ir tomando ciertas pautas que nos ayudarán, a todos, a ir acostumbrándonos a lo que nos espera a partir de sólo unas semanas. Aunque hablamos de forma generalizada, no olvidemos que cada niño, y cada familia, es un mundo y no a todos nos sirven los mismos consejos. Para algunos, la vuelta al cole puede ser un drama, mientras que para otros será una bendición. En cualquier caso, ya podemos ir preparándonos para ello.

Volver al colegio con alegría

Es importante que reforcemos la parte positiva de la vuelta al cole con nuestros niños. Háblales de lo bien que lo pasan, el encuentro con sus compañeros y lo mucho que van aprender a lo largo de este nuevo curso. Tus comentarios son fundamentales para que afronten esta nueva experiencia con alegría. Así que tu actitud ha de ser siempre positiva, mostrándole la parte divertida de la experiencia.

Preparar los materiales en familia

Una de las partes más divertidas de la vuelta al cole es la preparación de los materiales que tendrá que llevar a lo largo del curso. A estas alturas ya te habrán comunicado la lista de libros de texto que necesita, tanto si tienes que adquirirlos como nuevos o acudir a mercadillos de segunda mano, hazle partícipe de esta «aventura». Si hay que forrarlos, poner el nombre o utilizar cualquier tipo de etiqueta, deja que sea él el que te ayude.

También está bien que ya vaya preparando la mochila en la que incluirá los materiales necesarios, al menos durante los primeros días y hasta que el profesor le indique si necesita alguno especial. Libretas, bolígrafos, lápices de colores, una agenda… Podemos utilizar los que tenemos en casa, y los que no salir todos juntos a comprarlos, dejando que sea él quien decida.

Retomar horarios en comidas y sueño

Para que no sea el cambio especialmente drástico, ya podemos ir retomando esos horarios que tendremos que cumplir a lo largo del año. Es normal que en vacaciones todo se haya ido al traste: trasnochamos, nos levantamos tarde, dormimos la siesta, desayunamos casi a la hora de comer, las meriendas se vuelven eternas, picamos entre horas… Por mucho que hayamos querido cumplir una rutina es lógico que el orden se haya alterado.

De forma paulatina vamos a ir acostándonos más pronto, madrugar un poquito, aunque al principio tengamos sueño e ir cumpliendo los horarios de las comidas. Así sin darnos cuenta ya estaremos ajustándonos a la rutina nuevamente.

Dar ejemplo

Y al final todo se reduce con nuestro ejemplo y comportamiento. De nada nos sirve querer educar a nuestros niños si no somos el espejo en el que se pueden mirar. Si nosotros no somos capaces de empezar a ajustarnos a la rutina, poco podremos hacer con nuestros niños. Ya sabes aquello de que «las palabras se las lleva el viento», así que mejor quedarnos con los hechos.

Fotos | Siete pecas y Farmacia Blanco Vicente

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