Receta para niños: Leche merengada

Llega el verano y, junto a él, experimentamos ciertos cambios en la alimentación. Ya no nos apetecen tanto los alimentos calientes y vamos buscando aquello que nos refresque y nos alivie de las altas temperaturas. Son muchos los menús que podemos preparar en frío y con los que no tenemos que renunciar a seguir una buena dieta. Sea cual sea la época del año no hay que descuidar la buena alimentación.

Uno de los alimentos que nos acompaña a lo largo de nuestra vida es la leche. Desde nuestro primer segundo de vida estamos entrando en contacto con este alimento rico en nutrientes, además es muy importante para el desarrollo durante la infancia, fortaleciendo los huesos y aportando vitaminas imprescindibles para el buen funcionamiento del organismo. Un buen vaso de leche caliente en invierno nos reconforta y alivia pero ¿y en verano?… Una buena forma de seguir manteniendo nuestro ritmo lácteo durante las épocas de calor es prepararla fresquita añadiéndole otros alimentos, así nos encontramos, en este caso, con la leche merengada, una forma estupenda de que nuestros niños sigan tomando su leche sin rechistar.

Ingredientes: 1 litro de leche, 4 claras de huevo, 1 ramita de canela, azúcar y corteza de limón.

Modo de hacerlo:

• Batimos las claras de huevo hasta que estén a punto de nieve.
• Hervimos la leche con la ramita de canela y la corteza de limón, de este modo va a adquirir ese sabor característico y tan especial.
• Una vez empieza a hervir vamos a añadirle el azúcar. Aquí cada uno tiene su medida dependiendo del dulzor que les apetezca.
• Separamos del fuego y añadimos las claras montadas. Debe hacerse de forma muy despacio y con suavidad para que la leche mantenga su textura, quedando como una crema que tan rica sabe luego al paladar.
• Dejamos enfriar y, a la hora de servir, podemos añadirle un poquito de canela en polvo para decorar.

Vía | Naturcocinasana

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