Otoplastia para corregir las orejas de soplillo
Todos estamos de acuerdo que la infancia y la adolescencia son períodos maravillosos donde el ser humano es capaz de desarrollarse y forjar su carácter que le va a acompañar durante el resto de su vida. Según las experiencias que se vivan durante esta etapa nos enfrentaremos a un adulto equilibrado, sensible o inmerso en diversas preocupaciones que, a una edad avanzada, ya no sabe muy bien desde que lugar remoto de su pasado vienen a ocupar su presente.
Pero de igual modo que sabemos nuestra obligación de procurarle una vida digna y feliz a nuestros hijos, también debemos estar atentos a sus necesidades, pues también en esta primera época de su vida, puede empezar la proliferación de los complejos y de los rechazos hacia su propia natural anatomía. Aquí es donde debemos saber educarlos en la aceptación de sí mismos, con sus propias limitaciones y sus muchísimas virtudes. Pero, también es cierto, que algunos de estos defectillos se pueden corregir de una forma sencilla, de este modo nos vamos a evitar muchos problemas futuros.
La otoplastia es una técnica quirúrgica con la que se consigue corregir la alteración en la posición y forma de las orejas. Son muchos los niños que tienen, lo que popularmente se llama, «orejas de soplillo» y que, en la mayoría de los casos, sufren el escarnio y burla de sus compañeros. Pero, además, esta técnica sirve para corregir los lóbulos deformados, rasgados o cualquier otra alteración estética en el pabellón auditivo.
La operación dura, según los casos, entre una hora y media y tres horas. Se realiza con anestesia local y no requiere de ingreso hospitalario. Se puede realizar tanto en niños como en adolescentes, eso sí, en el caso de los primeros es necesario que hayan cumplido los ocho años a fin de que no afecte a su desarrollo físico o psicológico.
Vía | Naturpeques
Psicología Salud #adolescente #complejo #hospital #intervencion #sanidad