Niños en bicicleta: medidas de seguridad
Uno de los artilugios que aparece en la infancia de todo ser humano, por regla general, es la bicicleta. Las ruedas siempre son una gran atracción para los más pequeños. Es así como empiezan con los andadores, los triciclos, la bici con ruedines, hasta llegar, por fin, a la bicicleta de dos ruedas con la que moverse libremente en sus paseos familiares.
Moverse en bici es una de las prácticas más sanas y divertidas que podemos ofrecer a los niños, pero también es nuestra obligación enseñarles que existen unas normas y medidas de seguridad que deben respetar en todo momento, de esta forma evitaremos accidentes que pueden resultar especialmente graves.
El casco, el elemento principal
Aunque todavía nos queda mucho para llegar a la media europea en torno al uso de la bicicleta, las estadísticas nos muestran que algo más de un 70 por ciento de los niños españoles, entre 5 y 14 años, monta en bici, cifra suficiente para que extremar las precauciones, y medidas de seguridad en este rango de la población.
Según este mismo informe, realizado por la DGT, uno de cada cinco niños fallecidos lo ha hecho debido a un golpe en la cabeza producido por una mala caída de la bicicleta, mientras circulaba sin casco. Es así como se decidió que todos los menores de 16 años debían llevar casco de forma obligatoria, tanto si está circulando por la ciudad como fuera de ella. Incluso aquellos que van como pasajeros en la bici de un adulto.
Pero no solo es necesario llevar casco, también hay que ponerlo de la manera correcta. El primer paso es comprobar que está homologado, por lo que nos garantizará unas medidas mínimas de seguridad. Después hay que ajustarlo bien a la cabeza del niño y pasar la correa debidamente por debajo de la barbilla.
Respetar las normas de tráfico
Especialmente cuando circulamos por la ciudad, es importantísimo que se respeten las normas de tráfico ya que son para todos por igual. Enseñarles las señales de stop, de paso de peatones, límites de velocidad…Hacer que aprendan el brazo que tienen que mover cuando van a girar por una esquina o cuando van a parar. E invitarle a que utilice el carril bici siempre que sea posible.
Otros consejos que nos llegan desde los expertos en circulación son:
- No llevar auriculares escuchando música que impide oír lo que sucede alrededor.
- No llevar ningún pasajero ni hacer competiciones.
- Al llegar a un cruce moderar la velocidad o, incluso, parar.
- La bici debe llevar: luces frontales, un timbre, piezas reflectantes delanteras, traseras y en las ruedas, también en la ropa debemos colocar alguna cinta o señal reflectante.
Y no olvides que, además de todo ello, tu ejemplo siempre es la mejor lección. Si eres un buen ciclista, respetuoso con las normas de circulación y con el resto de seres humanos, ya sean conductores o peatones, tus hijos también lo serán.
Vía | Consumer
Fotos | Ciclosfera y Autobild
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