Las mascotas, un regalo diferente

Son muchos los niños que aprovechan las Navidades o su carta a los Reyes Magos para hacer un pedido un tanto especial y es el de una mascota. Por eso, antes de que este ser vivo llegue hasta nuestra casa, debemos tener en cuenta y valorar una serie de aspectos que van a venir con él, más que nada para que nadie se llame a engaño y ocurra lo que en muchos casos, desgraciadamente, acaba sucediendo.

Primero debemos hablar con nuestro niño y hacerle entender la gran responsabilidad que supone tener una mascota en casa. Debido a que se trata de un ser vivo necesita de una serie de cuidados, atenciones y necesidades que debemos cubrir sin ninguna duda. No es un juguete del que nos cansamos y arrinconamos para sustituir por otro nuevo. De repente es, otro miembro de la familia al que hay que cuidar con todo mimo.

Evidentemente el niño, ante la posibilidad de conseguirlo, va a prometer un millón de veces que va responsabilizarse de sus cuidados pero, difícilmente lo hará pasados los primeros días de la sorpresa inicial. Eres tú la que va a ocuparse de él en todo momento por lo tanto, es justo que valores si quieres tener esta nueva obligación añadida. Sacarlo a pasear, llevarlo al veterinario, darle de comer, etcétera. Queramos o no, para los niños es otro juguete más de los que suelen apilar tras el primer impacto de alegría.

Es por esto que, si no habéis estado, previamente, conviviendo con algún tipo de animal, lo mejor es que le ofrezcáis al niño la alternativa de empezar con una mascota virtual. En el mercado existen un buen número de ellas y, de algún modo, les hará ir tomando conciencia de la responsabilidad que supone tener un ser vivo a su cuidado. La comparación puede ser odiosa pero, al menos, sabemos que cuando acabe cansándose podrá ponerlo a reciclar como tantas otras cosas.

Vía | Charhadas

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