Día del Padre; más allá de los regalos
En el día del Padre, los regalos son muy importantes. Sin embargo, existen otros factores más importantes en la celebración de este día. En primer lugar, conviene pensar en el rol del padre moderno que no sólo se implica en su trabajo, sino que también, se compromete con su familia, se implica en la educación de sus hijos, comparte tiempo con ellos, se desenvuelve bien con sus emociones… Al igual que la mujer ha evolucionado mucho a nivel social, los hombres también lo han hecho.
Por otra parte, el día del Padre también muestra que los hijos deben tener una gratitud esencial hacia sus progenitores. Dicha gratitud es la base del respeto. Sin embargo, está claro que es positivo tener la actitud adecuada para mejorar la relación entre padres e hijos. Para ello, el padre también puede tomar ciertas iniciativas.
Por ejemplo, es importante enfatizar los logros y no sólo poner el punto de atención en las correcciones y en las críticas. Además, los niños también se ilusionan cuando sus padres comparten tiempo con ellos. Por ello, proponle planes para el fin de semana.
Mientras que la relación de pareja puede romperse en algún momento, y así es como llega el divorcio, por el contrario, la relación entre un padre y un hijo es para siempre. Por ello, debe alimentarse por ambas partes. Detrás de cada padre también existe una historia personal. Por ejemplo, existen padres coraje que sacan a sus hijos adelante en solitario. Los padres tienen la generosidad de renunciar a muchas cosas en su día a día por el bien de sus hijos. Anteponen las necesidades de los niños a las propias. Tienen un instinto de protección muy desarrollado. Como recompensa a este esfuerzo, ellos, merecen que cada día recuerdes que cualquier momento es bueno para celebrar el día del Padre y decir: gracias.
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