Ayuda a tu niño a superar la timidez
Vamos a partir de la base que existen niños con todo tipo de carácteres, los hay más abiertos, más o menos sociables, y, también, más reservados. Querer conseguir un determinado patrón para nuestro pequeño es uno de los graves errores que cometemos los padres que queremos se comporte o sea de determinada manera. Pero puede ser que esa introspección no sea, solamente, un rasgo de su carácter y se convierta en un impedimento para relacionarse con los demás y que le impida desenvolverse con naturalidad en su día a día. Es entonces cuando aparece la «timidez patológica».
Los niños hacen muchos cambios a lo largo de su infancia, así veremos como el carácter les va variando según van acumulando experiencias. Pero si quieres ayudar a que tu pequeño se sienta más cómodo y disfrute de sus relaciones personales, aquí te dejo algunos consejos que te pueden venir estupendamente, tanto en los que puedes aplicar como en los que debes evitar.
Entre lo que debes evitar encontramos:
- Ponerle en evidencia, obligarle a hacer lo que no quiere o llamarle la atención en público.
- Excusarle y confirmar ante los demás que es tímido, ya que le reforzamos esa idea.
- Compararle con su hermana, su primo o el vecino. A nadie nos gusta que nos digan que los demás son «más y mejores» que nosotros.
Pero entonces ¿qué podemos hacer?
- Pedirle gestos pequeños, al principio, para que se haga más sociable: invitar a algún compañero del cole a casa o ir al parque un rato para que tome contacto con otros niños.
- Hablar con el profesor para saber hasta que punto puede preocuparnos o no, a menudo los padres lo vemos todo de forma exagerada, ellos tienen más juicios de comparación ya que conviven con niños día a día, y te pueden tranquilizar.
- Enseñale a ser sociable a través de tu propio ejemplo. Si tú no lo eres, difícilmente podrás enseñar a tu hijo. Esfuérzate en hablar con tus vecinos o invita a algún amigo a casa.
- Quiérelo tal como es y demuéstraselo. Con paciencia y tus ejemplos, irá avanzando poco a poco y su carácter se abrirá, pero eso sí, siempre que no le fuerces ni le obligues a hacer algo que no quiera.
Vía | Ser Padres
Foto | Miércoles