Artes marciales, no es lo que pensamos

Cuando nuestros pequeños nos dicen que quieren ir a aprender artes marciales, podemos pensar que esto implicaría un acto de violencia o que lo usaran para defenderse o para atacar a otras personas. Esta es la imagen errónea que muchas veces nos traen los dibujos animados o cierto tipo de películas. Pero esto no es así, si los pequeños realizan artes marciales podrán ir modelando su carácter de manera pacífica.

Algunas artes marciales pueden resultar muy divertidas para los niños, sin importar si son mujeres o varones. Además, el hecho de realizar este tipo de disciplina permite que los pequeños vayan desarrollando auto disciplina y ayuda al desarrollo de la interacción con otras personas. Muchos especialistas en el aprendizaje pediátrico recomiendan a los padres que los peques realicen artes marciales ya que ayudan a la concentración y a controlar su energía.

Los niños que realizan este deporte (o disciplina) van progresando en la complejidad y eso queda demostrado por el uso de diferentes cinturones que van variando los colores. Cuando uno presencia una clase verá como el respeto a las normas y la disciplina están presente en cada momento, un claro ejemplo de ellos es que al iniciar la clase se saluda respetuosamente al maestro (así es llamado a quien les enseña), por otro lado es una disciplina llena de ‘ceremonias’ donde el cuerpo es una herramienta para manifestar diferentes cosas.

Vía | Vivir Salud
Foto | Flickr – Municipalidad de Peñalolen

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